Los especialistas detectan que personas cada vez más jóvenes acuden a las consultas con molestias en el oído
Especialistas en salud auditiva han detectado un aumento preocupante en la cantidad de personas jóvenes que acuden a consultas con molestias en los oídos. Aunque la pérdida de audición no suele producirse de un día para otro, el daño auditivo es gradual y, en sus primeras etapas, puede pasar desapercibido para quien lo padece.
Al principio, los afectados notan una dificultad para seguir conversaciones en entornos ruidosos: espacios públicos abarrotados, restaurantes, reuniones de trabajo en oficinas o incluso en la calle. Este tipo de molestias puede parecer leve al inicio, pero tiende a empeorar. Con el tiempo, resulta difícil escuchar incluso las voces fuertes, y lo que comienza como una pérdida auditiva leve puede evolucionar hasta la sordera.
Este patrón, que antes era más común en personas mayores, empieza a verse con más frecuencia en jóvenes. Los especialistas señalan que el uso frecuente de dispositivos de audio a volúmenes altos, junto con la exposición continua a ambientes ruidosos, son factores que contribuyen al aumento de estos problemas.
